Conforme el tiempo te lo permita, establece una rutina. Trabaja en tu rutina de calentamiento, una vez por la mañana y otra por la noche todos los días. Asegúrate de calentar primero… estirar los músculos fríos puede causar más daño que beneficio. Planea cuidadosamente tu rutina. Ejemplo de rutina… Sostén cada estiramiento de 30 segundos a 1 minuto. No hagas estiramiento por mucho tiempo, ya que podrías lastimarse. Haz un carpado, una horcajada (izquierda, derecha, centro), la mariposa, el puente (asegúrate de empujar a través de tus hombros), splits (izquierda, centro, derecha) … Si ya llegas al suelo con tus splits entonces ya es hora de que pongas el pie delantero arriba en un nivel más alto. Si siempre te estás cayendo estira las muñecas y los tobillos también. Si estás a punto de salir en una presentación o de empezar una práctica asegúrate de no “sobrepasarte con los estiramientos”. Esto puede causarte pérdida de fuerza y estabilidad justo después del estiramiento. Ten cuidado durante los estiramientos. No debes rebotar, esto te causará desgarres en los músculos. El estiramiento duele y es incómodo, pero ‘No lo hagas demasiado’ ya que te harás da daño.