LAS PORRISTAS TAMBIÉN ARRIESGAN SU SALUD Y SEGURIDAD EN LA CANCHA

La animación deportiva ha evolucionado durante más de un siglo y actualmente incluye acrobacias sumamente difíciles y peligrosas.

Hoy en día, los porristas son como acróbatas —especialmente las de escuelas preparatorias y universidades, ya que no solo bailan, sino que hacen piruetas, pirámides y lanzamientos—, y se debate si la animación es o no un deporte. Algunas organizaciones de porristas dicen que la disciplina no cumple con los criterios para ser considerada un deporte. Sin embargo, la Academia de Pediatría de Estados Unidos (AAP, por sus siglas en inglés) estableció desde 2012 que los porristas deben ser considerados atletas, ya que, al igual que los futbolistas y otros deportistas, pueden sufrir lesiones serias


Cuando las porristas llegaron a las canchas en el siglo XIX, su objetivo era animar a sus barras y equipos con cánticos, bailes y pompones. Pero eso ha cambiado. Ser porrista actualmente conlleva mayores exigencias, ya que estos jóvenes, hombres y mujeres, ejecutan acrobacias gimnásticas no solo impresionantes, sino también peligrosas.

“La animación se en los últimos años y las habilidades que ha incorporado son más complejas que antes”, dijo la especialista en pediatría del deporte, Cynthia LaBella, miembro del Consejo de Medicina del Deporte de Estados Unidos y Aptitud Física de la AAP.