“Oremos por Palmira. La música resucita a los restos antiguos” es el nombre del concierto que se lleva a cabo en la ciudad histórica siria,  el cual fue dirigido por el director ruso Valery Gergiev

El pasado jueves 05 de Mayo la Orquesta Sinfónica del teatro Mariinsky de San Petersburgo (Rusia) ofreció un concierto en el anfiteatro de la ciudad Siria de Palmira, lugar donde los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI) solían perpetrar sus ejecuciones públicas.

La ciudad pertenece a la lista de la UNESCO, por su siglas en inglés, como patrimonio mundial. Palmira estuvo ocupada durante casi un años por el autodenominado Estado Islámico (Daesh en árabe), que destruyó varios edificios emblemáticos. A finales del mes de abril pasado, el ejército ruso anunció que había terminado el proceso para desminar la ciudad antigua.

La Orquesta toco aproximadamente durante 20 minutos, este fue el concierto más corto de la historia del Mariinsky. El concierto en Palmira, conocida como “la Perla del Desierto”, es una muestra de “la solidaridad de las personalidades de la cultura con los que luchan contra los terroristas”, declaró a los periodistas el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.