A los seis años de edad, Mozart ya era un intérprete avanzado de instrumentos de tecla, y un eficaz violinista. También demostraba una extraordinaria capacidad para la improvisación y la lectura de partituras. A esta edad, Mozart ya se presentaba en giras por las cortes europeas, acompañado de su padre y de su hermana Nannerl, logrando un gran éxito. Empezó por Munich, luego Viena, Paris, Londres… lo que supuso para Mozart valiosas experiencias.
Sus primeras composiciones, entre las que se incluyen sonatas para piano y violín y sinfonías, todavía hoy son interpretadas por grandes orquestas y músicos de un modo general. A los 13 años de edad, Mozart empezaba su marcha por Italia donde fue condecorado por el Papa con la distinción de Caballero de la Espuela de Oro. Un año después, en Milán, el compositor escribió su primera gran ópera, Mitridate; con esta obra su reputación como músico se hizo aún más evidente.
Además de la música, Mozart se ocupaba de otras aficiones. Una de ellas era el juego de billar. También poseía un caballo, y pájaros. A sus 15 años, Mozart volvió a Salzburgo donde compuso sus primeros cuartetos para cuerda, sinfonías, conciertos para fagot, aparte de otras óperas. Seis años después se marcha a Munich con su madre, Anna María Pertl, buscaba por Europa un lugar mejor remunerado pero allí no lo consiguió. Decidió irse a Paris, donde estrenó nueva sinfonía y un ballet.