La Filarmónica de Berlín abre sus puertas para recibir a 1.000 visitantes a un concierto a modo de test para probar las medidas contra el coronavirus.
Es obligatorio que los espectadores pasen por el centro de pruebas que se ha instalado dentro de la misma Filarmónica. Si dan negativo en coronavirus pueden pasar. Más vale no ser positivo en porque las entradas se agotaron en solamente tres minutos.