A un baterista hay que tratarlo como un auténtico atleta, que a la hora de salir al escenario tiene que poner toda la carne en el asador. Para empezar sólo hay que ver todas las partes que tiene una batería básica, que según los entendidos y los músicos son las siguientes: Tambores,bombo y Platillos.
A partir de estos instrumentos le puedes añadir un sinfín de accesorios, como más tambores y platillos, cencerros, bloques de madera, panderos.El músico tiene que mover prácticamente todo su cuerpo para hacer sonar todos los instrumentos a la vez y QUE SUEN BIEN !!!
Por todo esto, ahora comprenderéis por qué los bateristas son auténticos atletas que tienen que tener la resistencia suficiente para aguantar un concierto dándolo todo y fuerza para que todos los instrumentos suenen bien y rotundos.
Todo esto implica una larga y tortuosa lista de dolencias y lesiones que están obligados a tener en cuenta y ponerles remedio. Hay dos puntos que están muy claros, el primero es la necesidad de aprender los movimientos básicos de la mano de un profesional para evitar malos hábitos de postura, y el segundo es la importancia de un buen calentamiento y estiramientos a nivel general antes de cada práctica o concierto. A partir de aquí, las lesiones que vayan surgiendo se tienen que tratar en la mayor brevedad para que no pasen a más.
Lesiones más comunes
Las lesiones de los bateristas suelen ser muy variadas pero tienden a ser siempre las mismas (posturales y articulares) porque tocar una batería implica movimientos simultáneos de pies y brazos, una gran exigencia postural, inestabilidad esquelética y recordemos también que no es lo mismo tocar un estilo de música que otro. Estos músicos se enfrentan sobre todo a contracturas en la espalda, calambres, tendinitis, fracturas por estrés, sobrecargas musculares, retracción o acortamiento muscular…algunos (por no decir lo mayoría) a lo largo de sus carreras llegan a romperse los tímpano en pruebas y audiciones.