¿Quieres conocer las claves para evitar forzar la voz al cantar?
1. La famosa respiración
La respiración no te sirve para aprender a cantar. De hecho, no te ayuda a mejorar como cantante y ni mucho menos es la base del canto.
En lo que sí que te ayuda es en que relajes tu cuerpo y ese es el primer paso para dejar de forzar tu voz.
No es importante porque tengas que aprender a respirar. Ten en cuenta que tú ya sabías hacerlo de manera instintiva desde que el médico te sacó del vientre de tu madre, sino no estarías leyendo este artículo ahora mismo.
Lo clave de la respiración en el canto es conseguir no hacer nada diferente en ese sentido cuando cantas y cuando hablas.
Dependiendo del estilo que cantes vas a necesitar más o menos capacidad pulmonar, pero para cantar en sí, no necesitas más que lo que ya tienes y no necesitas saber más que lo que ya sabes.
2. Libera tu voz
Para evitar forzar la voz al cantar tienes que conseguir liberarla.
Liberar la voz se consigue permitiendo que entre en juego tu voz de cabeza, es decir, dejando que suene mucho más ligera y mucho menos tensa.
Esto puede resultar muy difícil para algunas personas, sobretodo si lo que quieren es conseguir sonar con más potencia y lo quieren ya.
Eso por no mencionar que es algo nuevo y que al principio te va a dar la sensación de que haces falsete y vas a tener una sensación como de desequilibrio.
3. Bajar el volumen
También es algo que te hemos repetido hasta la saciedad, pero es que es realmente importante.
Aunque te parezca que lo has bajado lo suficiente, si aún no eres capaz de conseguir que tu voz suene más ligera, probablemente significa que aún puedes reducir un poco más el volumen.
Queremos que reduzcas el volumen manteniendo tus cuerdas vocales juntas y reduciendo la presión de aire al exhalar.
4. No aprietes la barriga
Recuerda que no necesitas hacer esfuerzo físico para emitir el sonido.
Si aprietas los músculos como si quisieras levantar algo muy pesado vas a apretar también tus cuerdas vocales y eso va a hacer que no salga el sonido y que te hagas mucho daño.
5. Date tiempo y ten paciencia
Aunque al principio te parezca que estás haciendo falsete y que no estás obteniendo la potencia que quieres, es necesario empezar por ahí y sobretodo, es mejor empezar con un sonido más ligero que forzar tu voz.
Poco a poco sentirás como vas pudiendo añadir más volumen sin esfuerzo.
Sé que esto es duro, sobretodo si tienes actuaciones de manera regular.
Es lógico, no quieres retroceder o sonar peor durante un tiempo.
Pero es importante que cuando practiques sigas estas pautas, aunque después en los conciertos no lo hagas.
Es más, recuerda que en los conciertos tienes que olvidarte de todo y simplemente disfrutar.