UNINTERLINGUA 2015

U N I N T E R L I N G U A 41 el grafismo y el cuerpo se representa como primer tema del dibujo, ya que está en el principio de la creación del espacio y de la representación. En el dibujo, al igual que en el sueño, se transforman las relaciones tem- porales en relaciones espaciales. Sami-Ali concluye que lo inconsciente es atemporal porque es espacial. A modo de ejemplo po- demos citar la anécdota de una niña de seis años que cumpliendo con la tarea de dibujar montañas, las coloreó de azul. Cuando su maestra las vio, le corrigió sorprendida que las montañas eran cafés, en un verdadero alarde de inhibición de la creatividad fre- cuente en la escuela. La pequeña respondió “si se ven de lejos, las montañas son azules”. Sin embargo, no todo juego y dibujo es creativo en un sentido estético, a veces lleva la marca de lo que no se pudo crear. De hecho existen juegos que no implican elaboración sino descarga de lo que no se pudo elaborar, por ejemplo, el juego del niño psicótico que implica en ocasiones la ex- presión de la angustia de aniquilación. Así mismo, en niños gravemente perturbados los dibujos del cuerpo exhiben un contorno cortado, abierto y discontinuo que pone en evidencia la falla del límite dentro-fuera. Cuando el tiempo determina esa cri- sis inevitable en la vida de todos, que es la adolescencia, sucede la ruptura de todo lo conocido, el cuerpo no es el mismo, ya no es el del niño que aumenta su tamaño, sino que cambia su estructura interna y externa, con exigencias para las cuales el niño no se encuentra preparado. Los padres dioses están perdidos, cayeron desde tan alto que se hundieron en el suelo y conviven con los gusanos. La infancia misma, toda ella “es- pacio transicional” poblado de realidades mágicas, se esfumó. Y el sujeto enfrenta nuevamente la soledad dolorosa del naci- miento mismo. Si la destrucción es la condición para crear, este es el momento propicio de ha- cerlo. ¿Quién no ha escrito, o intentado al menos un poema?, ¿Quién en esta etapa de la vida no sintió el dolor del artista? Dolor del duelo que demanda un trabajo elaborado, creativo, e implica un repliegue en aislamiento. Es por eso que Gutton con- sidera a la adolescencia como un momento en el cual el sujeto trabaja en crearse a sí mismo y que está creando una nueva iden- tidad así como una nueva manera de posi- cionarse frente al mundo y los otros. ¿Dónde se aísla el adolescente, para trabajar y trabajarse? En el espacio de sus iguales, en sus gru- pos, porque es un trabajo tan pesado que se necesitan varios para llevarlo a cabo. Igual que el niño, el adolescente jue- ga con otros para sí mismo. A diferencia del niño los brazos de la madre no son sostén Juego de niños...