UNINTERLINGUA 2017

sis de que dicho texto lleva un término (singular o plural) oculto, que dará conclusión, justamente en el parlamento de Enrique VIII al final de la obra: ¡No existe Ana Bolena! Juana es mía.  De suerte que si se sustituyen los términos re- presentados, por las claves ocultas, el significado de la imprecación de Percy, al hablar de Ana Bole- na, cobra otra dimensión referencial, al pasar de la súplica a la rebelión: PERCY: Nunca he temblado: tiemble sólo el malvado, tiemble el reo; mas yo defiendo la justicia santa, yo la inocencia y la virtud defiendo. Arrancadme la vida si así os place: dividid mi cabeza de mi cuerpo; temblar no me veréis en el suplicio, mi nombre cubriréis de lauro eterno. ¡Oh Dios! ¡Oh santo Dios¡ ¡Las horas corren! ¡Ana infeliz! = Patria (libre) infeliz ¡Se acerca ya el momento! (…) .¡Piedad! ¡Piedad! Concibe mi tormento No derraméis la sangre de una esposa. ENRIQUE VIII: No era mi esposa, conde, he aquí el decreto del primado, que anula el matrimonio, porque con vos contrajo en otro tiempo esa mujer solemnes esponsales... PERCY: ¡Qué escucho! ¡Eterno Dios! ¿No estáis contento con derramar su sangre, y en su hija = sus hijos (los mexicanos) también os vengaréis? Pero si es cierto ese motivo, la sentencia es nula: ¡cómo sin matrimonio hay adulterio! ¡Mi esposa! Si lo fuese, ¿quién osara = Mi tierra. Si yo la gobernara... arrancarla de mí? Ni el poder vuestro fuera capaz de tanto, sin que antes pudiera hollar mi desangrado cuerpo. Si fuese mía , el universo absorto = Si yo la gobernara me hubiera visto trastornar un reino,.................... (Alusión a la pérdida de Texas antes que a ella en un cadalso infame, que sufrió México) yo hubiera levantado mil guerreros, y ayudado de Dios y de mi brazo, hubiera penetrado a sangre y fuego en la ciudad y en el palacio mismo, o matando tal vez hubiera muerto. Como se ve, el texto oculto remite al lector-públi- co a referentes totalmente diferentes a los del texto representado. El personaje de Percy (de otra na- cionalidad, de otro tiempo, diverso al del autor) está declarando que el autor-oculto habría dado la vida, antes que dejar perder el territorio de la patria. ENRIQUE: ¡Pobre conde, ya el juicio habéis perdido: de vuestro frenesí me compadezco! PERCY: ¡Salvadla!... (A Ana = A la Patria ) ENRIQUE: Ya no es tiempo. ¡No existe Ana Bolena! = No existe la Patria libre. Juana es mía. = La Patria sometida es mía. PERCY: Confúndate Dios en el infierno. = Confunda Dios a Santa Anna en el infierno. Marcela del Río Reyes

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