UNINTERLINGUA 2018
69 con el otro: Queremos observar un encuentro y reflexionar sobre él. ¿Dónde y cómo un filó- sofo se encuentra con un otro? Un filósofo se encuentra con un otro en lugares y circunstan- cias concretas: en un salón de clases, en una calle, en las palabras que ese otro puede profe- rir en un escrito o en una conversación…¿Hay algo que se quiera lograr con este encuentro? ¿para qué quiere un filósofo encontrarse con un otro? ¿realmente quiere encontrarse con un otro o es un encuentro fortuito e indeseado? ¿quiere un otro encontrarse con un filósofo? ¿le resulta digno de ser escuchado lo que un filósofo tenga que decir? ¿y a un filósofo lo que un otro diga?. Las preguntas ubican el problema del encuentro con el otro, nos parece, en parámetros distintos: la aproximación es algo concreto, una manera “viva” de acercarse al otro y lidiar con él, algo que sucede más acá que lo aleja de la abstracta pretensión que ve al otro como alguien, tal vez algo, que debe ser definido y categorizado: Tiene que ser dicho (probablemente nunca escuchado). Individuos concretos, con todas sus pasiones y prejuicios, se encuentran con otros individuos concretos y el acercamiento, o el encontronazo, se da en circunstancias determinadas que pue- den ayudar, o tal vez dificultar, la aproximación hacia el otro; cómo, cuándo, dónde y con quien nos encontramos marcan el encuentro. La senda que queremos indagar para reflexio- nar sobre el encuentro con el otro parte pues de un presupuesto distinto: asumimos que hay un otro que enuncia, que afirma, que grita, que se interesa, que se aburre, que se cansa, que ama,
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