El Head Coach de los Seahawks habla sobre la decisión de jugar por aire en la última jugada ofensiva del Super Bowl 49
RENTON — Por primera vez desde que los Seattle Seahawks cayeran derrotados por 28-24 ante los New England Patriots en el Super Bowl XLIX, el entrenador en jefe Pete Carroll habló con detalle sobre el partido, incluyendo la última jugada ofensiva de su equipo, un pase que resultó en intercepción para los Pats.
Apareciendo en una entrevista de 20 minutos para el programa “Today” de la cadena NBC, Carroll fue franco respecto a la derrota de sus Seahawks, quienes entraron al cotejo como campeones defensores, y sobre todo la decisión ofensiva final para Seattle.
“Ha sido un remolino”, comenzó diciendo Carroll en la entrevista, la cual se llevó a cabo en uno de los campos de práctica techados de los Seahawks en Renton, Washington. “Han pasado muchas cosas, como siempre sucede al final de una temporada de fútbol americano, particularmente después de un Super Bowl… Siento que estoy en medio de este enfoque que me está llamando a ser muy responsable, poner el ejemplo, y asegurarme de hacer un buen trabajo. Me siento responsable por muchas personas en este momento, ciertamente desde la familia hasta la organización y los jugadores y entrenadores y todo eso, pero se extiende mucho más allá de eso cuando observas a la comunidad y a el área que nos sigue… Nuestro juego, los golpeó muy duro”.
Cuando se le preguntó si sintió shock en las primeras horas después de la derrota, Carroll respondió negativamente.
“No, tenía un trabajo por cumplir”, ofreció en entrenador en jefe de 63 años de edad. “Sentí que me necesitaban que estuviera encima de todo, para darle a todos perspectiva, y comenzar a lidiar con esto. Porque nosotros, yo no iba a permitir que las cosas fueran demasiado lejos antes de que empezáramos a descifrar lo que íbamos a hacer para seguir adelante, dar el siguiente paso, así que yo me tuve que ocupar de todo de inmediato”.
Carroll admitió que no tardó mucho en sentir el efecto del peso de su decisión sobre el resto del equipo.
“Inmediatamente, al instante de la entrega de balón, la gravedad de lo recién acontecido, lo comprendí”, dijo Carroll respecto al pase interceptado de Russell Wilson a manos de Malcolm Butler. “No he visto la repetición todavía, así que no lo sé, pero existe solamente un segundo o dos antes de que te levantas y empiezas a mirar hacia adelante y te empiezas a preparar para lo que viene”.
Carroll, quien estuvo a punto de convertirse en el primer entrenador en jefe de la historia en conquistar dos títulos de Super Bowl después de ganar dos campeonatos universitarios, confesó también que su decisión le ha robado el sueño por las noches.
“He estado durmiendo algo”, explicó Carroll. “Me despierto y no puedo dejar de pensar en ello, pero te duermes porque después del desgaste de los seis meses de la campaña, no puedes evitar quedarte dormido. Pero te sigues despertando. Es el volver a quedarte dormido lo que es el reto”.
Inmediatamente al término del encuentro, Carroll se responsabilizó por ordenar jugada de pase en segunda oportunidad y gol en la yarda 1 de los Patriots, con 26 segundos por jugar en el encuentro, pese a contar con el corredor estelar Marshawn Lynch en el backfield. Más tarde, el coordinador ofensivo Darrell Bevell también dijo que fue él quien mandó la jugada. En la entrevista con NBC, Carroll volvió a reafirmar que fue su decisión mandar el pase, explicando además el al raciocinio detrás de la llamada.
“Mandé la jugada que resulta del proceso de la preparación y de la práctica, junto a la mentalidad con la que he dirigido desde que me acuerdo, respecto a prepararse para hacer lo correcto en las situaciones”, afirmó Carroll. “Estoy convencido de que vamos a hacer lo correcto, o no vamos con esa jugada, no vamos con el concepto, no vamos a pedir a nuestros chicos ejecutar. Esa preparación me permite confiar en que los jugadores van a hacer lo correcto y tomarán las decisiones correctas, por lo que nunca mando una jugada pensando en que saldrá mal”.
Al explicar su lógica detrás de la decisión de lanzar, Carroll tocó coincidentemente los mismos puntos que explicó un día antes su contraparte, Bill Belichick –en una entrevista por radio en la que defendió a Carroll– respecto al personal de ambos equipos para la jugada.
“Esa jugada en ese momento, fue para explotar el pareo que existía”, externó Carroll. “Sabíamos que íbamos a lanzar el ovoide una vez en esa secuencia, en algún lugar, y de repente ellos tenían una defensiva de línea de gol que nosotros podíamos explotar lanzando, así que lo hicimos, y simplemente no resultó bien”.
El entrenador en jefe de los Seahawks señaló que no ha visto televisión, aunque está consciente del “ruido” que hay a su alrededor, y las críticas respecto a su decisión.
“Es el peor resultado de una jugada en la historia del Super Bowl”, justificó Carroll. “La llamada hubiera sido grandiosa si la hubiera atrapado. Todo hubiera estado muy bien y nadie hubiera dudado de ello”.
Sin embargo, Carroll dudó cuando se le preguntó si, sacando el resultado de la ecuación, haría lo mismo nuevamente en caso de que se presentara la oportunidad.
“Regresando una vez más, podría hacerlo diferente”, acotó Carroll. “No voy a decirle a mis oponentes en qué sentido lo haré a la siguiente. Pero tenemos la elección”.