Si bien el gimnasio es un sitio al que la gente acude para ejercitarse, independientemente de su propósito, hay que reconocer que a lo largo del día, en los miembros de cada uno, posiblemente sin excepción, es común encontrarse con personas que muestran comportamientos cuestionables y que pueden arruinar la agradable experiencia de quienes sí se entregan al 100% a su rutina.
Posiblemente los conozcas y de hecho, hasta los hayas llevado a cabo en algún momento, y si lo haces frecuentemente es mejor que reconozcas tu error y a partir de ello, evitarlo.
Utilizar el teléfono móvil
La verdad es que los smartphones se han convertido en herramientas imprescindibles de la vida, pero también en masivos distractores que solamente alimentan el ocio. A día de hoy es muy frecuente ver a personas que suspenden su entrenamiento, algunos entre serie y serie, mientras que otros en el peor de los casos, a mitad de una serie para atender su teléfono, no por una llamada, sino simplemente por haber recibido la notificación de algunas de sus redes sociales.
Evita el desorden
Recuerda que el gym es un lugar que compartes con otras personas, por lo que las cosas que ahí están, no son de uso personal, sino para todos los que acudan. Por esa razón, trata de dejar los accesorios que utilizaste en el lugar donde estaban, para que quienes dispongan de ellos más tarde, puedan encontrarlos fácilmente.
La ropa ajustada
Antes era mucho más común que ahora afortunadamente, pero todavía no faltan esos vanidosos que presumen sus avances llevando ropa tres veces más pequeña que su cuerpo, o mujeres con ropa interior provocativa para entrenar.
Lo más recomendable es siempre usar ropa que brinde esa comodidad necesaria y permita la transpiración de cuerpo.
Dejar las máquinas sudadas
Estos es igual de molesto que no encontrar algún instrumento porque alguien más decidió dejarlo en otro lugar. Por algo se llevan toallas al gym, para limpiarse el sudor y las máquinas mojadas con la transpiración después de usarse.
A nadie le gusta llegar y sentir la esencia y el mal olor de otras personas que ya hayan usado dichas máquinas.
Gritar
Lo sabemos, hacer una rutina de hipertrofia muscular, o incluso ir al gimnasio durante los primeros días resulta bastante difícil para el cuerpo, pero la verdad es que hay personas que se empeñan en gritar demasiado alto y a una frecuencia desesperante para conseguir ese extra de motivación al levantar una pesa que probablemente tenga más peso que tú.
La gente va al gym para ejercitarse, divertirse y de paso desestresarte, con tus gritos constantes no ayudarás a que eso pase.
Estas son una de las cinco cosas más molestas que me ha tocado ver en el gimnasio, ¿Tienes alguna otra que quieras añadir en los comentarios?