1º ETAPA
Para la primera, se necesitan 136 computadoras para formular todas las posibles combinaciones de calendario de acuerdo a las siguientes “reglas”
- Cada equipo tiene que jugar dos veces al año contra los otros tres equipos de su división. En el caso de Packers, tiene que jugar dos veces contra los Osos de Chicago, dos contra los Vikingos de Minnesota, y dos contra los Leones de Detroit. Estos son los equipos que integran la división NFC Norte. Hasta aquí llevamos 6 partidos.
- Cada equipo tiene que jugar cada temporada contra cada uno de los equipos de alguna división diferente a la propia dentro de su misma conferencia. Hasta aquí, ya van 10 partidos.
- Cada equipo juega una vez contra cada uno de los equipos de una división fuera de su conferencia. Hasta aquí, tenemos 14 partidos.
- Para los otros dos que hacen falta, cada equipo los juega contra algún similar de cada una de las divisiones que quedan dentro de su misma conferencia. Los equipos a enfrentar se eligen de acuerdo al lugar en su división en la que hayan quedado en la temporada pasada. Con esto, se completan los 16 partidos.
Hay que hacer la observación de que esta fórmula garantiza que cada uno habrá jugado contra los demás equipos de la liga en un término de 4 años. De paso, esta fórmula asegura los partidos intra-conferencia, lo cual “facilita” los criterios de desempate en caso de que al final de la temporada haya un empate dentro de la división.
Al finalizar esta etapa, las computadoras arrojan “nada más” 400,000 combinaciones de calendarios. Aunque todavía son demasiadas, ¡ya no son los 824 billones de combinaciones que había en un principio!
2º ETAPA
La segunda etapa consiste en que de todas estas posibilidades de calendarios que las computadoras generaron durante la primera etapa, un grupo de personas escogen el que mejor se adecue considerando factores como fechas, eventos locales que pudieran restarle atención al partido en determinada ciudad, tráfico, logística, fans, exigencias de las televisoras, de los equipos, etc.
Para ahondar más en lo anterior, y complicar más la elaboración de los calendarios, cada uno de los equipos tiene que jugar una vez en jueves por la noche.
Estos partidos, además, se pueden cruzar con otros de la MLB (Liga Mayor de Béisbol, por sus siglas en inglés), pues algunos equipos de dicha liga comparten estadio (Raiders de Oakland y Atléticos de Oakland) o estacionamiento (Cuervos de Baltimore y Orioles de Baltimore) con algunos de la NFL. Esto tiene que ser considerado también.
Por otra parte, los equipos pueden solicitar que alguna fecha determinada no se considere para jugar partido en su estadio, por alguna celebración o evento local, como algún concierto. En el 2012, por ejemplo, se recibieron solicitudes para bloquear más de 70 fechas.
Por si fuera poco, aún faltan algunas otras cosas qué considerar, como el hecho de que cada uno de los equipos tiene una semana de descanso por temporada, y la liga trata de evitar que los equipos que vienen de descansar se enfrenten a equipos que no han descansado, de manera que esto no le represente una ventaja competitiva a nadie.
Al final, tenemos un calendario que te tendrá cada domingo, y lunes y jueves durante la noche, pegado a la televisión.
Sorprendentemente hasta hace algunos años el calendario de la NFL era hecho a mano, por Val Pinchbeck, aquí un video donde se habla de él, de cómo lo hacía y cómo inspiró lo que se hace actualmente en el calendario de la NFL:
EXTRA: Dificultad del calendario de la NFL
Después de todo este proceso, y más por ocio que por cualquier otra cosa, se publica la lista de “dificultad de calendario”. De acuerdo a los equipos a los que cada uno se enfrentará durante la temporada, y basándose en el lugar en el que terminaron en la tabla general de la temporada pasada inmediata, se determina el orden de dificultad de los calendarios de cada uno de los equipos.
Por ejemplo, con base en estas consideraciones, la lista de la temporada pasada (2015-2016) indicaba que los Acereros de Pittsburgh tendrían el camino más difícil, enfrentándose a los rivales que mejor posición en la tabla tuvieron durante la temporada 2014-2015: 9 de sus 16 partidos serían contra rivales que alcanzaron los playoffs. En total, 11 de sus partidos serían contra rivales que terminaron con récord ganador.
En cambio, el cielo de los Halcones de Atlanta sería el más despejado. Tomando en cuenta que cada equipo se enfrenta 6 veces en el año contra sus rivales de división, el calendario de Atlanta era mucho más fácil por el simple hecho de que el resto de los equipos de su división habían terminado con temporada perdedora. El calendario de los Halcones nada más incluía a 4 equipos que terminaron con temporada ganadora.
Aquí lo interesante es que, estadísticamente, los equipos con los 5 calendarios más difíciles sólo llegan a los playoffs el 24.1% de las veces, mientras que los que tienen los 5 calendarios más fáciles llegan más del 50% de las ocasiones.
