1) Planificar con antelación
Tómate el tiempo para planificar tu experiencia general de prácticas de principio a fin. Yo recomiendo empezar tu estrategia con mucha antelación, sobre todo si vas al extranjero. Cuanto antes se empiece, más flexible puedes ser, si decides cambiar tus planes a lo largo del camino.
2) No te agobies
Bien puede ser un cliché, pero Roma no se construyó en un día, y la planificación de tus prácticas de principio a fin no sucederá en un día. Es vital que lleves tu propio ritmo, que tengas objetivos realistas y te permitas tener tiempo libre para relajarte en medio de la confusión de la búsqueda de empleo, las solicitudes y los requisitos de visado. Dedica un tiempo específico una vez o dos veces por semana para trabajar en él. De esa manera, eres menos propenso a sentirte abrumado, y el proceso será más agradable.
3) Ahorra dinero
4) Mantén una actitud positiva y motivada
5) Cuidado con las expectativas
Seamos realistas, es descabellado esperar una gran responsabilidad en una empresa desde el primer día. Si tienes suerte, tu superior inmediato podría permitir que tuvieras un nivel de entrada en las reuniones, además de una amplia gama de tareas de oficina. Es importante entender que en una organización, los becarios son prescindibles. Por esta razón, debes saber tu lugar y no esperar en términos de una carga de trabajo total y de ritmo rápido. A medida que el tiempo avanza y demuestras más tus capacidades, tus jefes pueden confiar en ti con una mayor proporción de trabajo.