Ocotepec es una localidad del municipio de Cuernavaca en el estado de Morelos.
La palabra Ocotepec viene de náhuatl “okotepetl”; en donde “okotl” significa “ocote” y “tepetl” significa “cerro”. De modo que el nombre de esta población indígena significa “Cerro de los Ocotes”.Es un poblado antiguo que se ubica a sólo tres minutos de Cuernavaca .
El Día de Muertos es una de las cuatro fiestas más importantes de Ocotepec, esta celebración es la más concurrida de las 30 que se realizan en el estado.
El cementerio es el lugar donde inician los preparativos para la celebración, diez días antes del 2 de noviembre, familias enteras comienzan a arreglar sus tumbas, las pintan y las redecoran.
Una de las tradiciones en Ocotepec consiste en levantar ofrendas en honor a quienes fallecieron durante el año; a estos altares también se les conoce como “Ofrendas Nuevas”. Éstas se montan sobre una mesa y se recrea el cuerpo del difunto, el cual se viste con ropa nueva, huaraches y sombrero o rebozo; a la altura de la cabeza se colocan las tradicionales calaveras de azúcar. Una vez vestido, el cuerpo se rodea de las bebidas y los platillos que fueron los favoritos del difunto. En el caso de los altares de los niños se incluyen juguetes y golosinas.
Los elementos tradicionales de una ofrenda son el pan, el cual es elaborado con productos de la Tierra; el agua, considerada la fuente de la vida y por la que lucha el espíritu en contra de la muerte, además de que sirve para calmar la sed durante el camino; el fuego, el cual purifica y llega a los muertos por medio de las velas del altar; y el viento, que da movimiento al papel picado del altar, alegrando así el espíritu.
En las ofrendas también encontramos las flores de cempasúchil y el incienso, que ayudan a los difuntos a encontrar el camino a casa y a sus familiares. Algunos encienden cuatro velas y las colocan en forma de cruz, orientada hacia los cuatro puntos cardinales, que sirven para bendecir los caminos por donde llegará el espíritu del difunto.
Las casas con ofrenda nueva se reconocen por un camino de flores que se extiende desde el altar hasta la banqueta. Es una forma de avisar que ahí se espera la llegada de un difunto y que la gente puede pasar, si así lo desea, para admirar la ofrenda. A los visitantes se les invita a pasar y son recibidos amablemente con panes, ponche, café y tamales.
A cambio de esto, las personas otorgan respeto, afecto y algunas veces llevan velas o flores para el altar, en agradecimiento a las atenciones recibidas.
Aunque algunas de las casas con Ofrendas Nuevas son muy humildes, el honor a sus difuntos es grandioso, pues se entregan a ellos por completo, tanto en el aspecto económico como en el tiempo que les dedican.
Durante dos días, se espera con gusto y tristeza la llegada de los difuntos; mientras tanto, también los vecinos de lugar realizan visitas y van a comer a las casas donde se colocaron Ofrendas Nuevas.
Estos días, en las calles del pueblo se instalan puestos que ofrecen el tradicional pan de muerto, recién preparado y horneado.Otra de las peculiaridades del poblado de Ocotepec es la procesión que se realiza durante las noches del 31 octubre y 1 de noviembre. Todo el pueblo acude al panteón, llevan ofrendas a sus difuntos y más tarde se sientan todos a comer a un lado de las tumbas.
Aunque Ocotepec no es un lugar muy conocido por los turistas, su particular forma de celebrar el Día de Muertos lo convierte en un sitio muy atractivo; ya que los visitantes gozarán de los sabores, aromas y colores de esta tradicional festividad mexicana.