En un duelo épico, de excelente y pésimo ajedrez, de todo y nada, pero pleno de emociones, el ruso Ian Nepomniachtchi (1,5-2,5, 2,5-1,5 y 0,5-1,5), eliminó a Magnus Carlsen en las partidas rápidas de desempate de las semifinales del Magnus Carlsen Invitational Chess 24.com. El otro finalista será el neerlandés Anish Giri que se impuso (2,5-1,5 2,5-1,5) al estadounidense Wesley So.
El campeón del mundo partía con una manga de desventaja. Necesitaba ganar, sin embargo, comenzó la jornada con un empate y una imprevista derrota en una posición que parecía tablas.
Solo un pequeño milagro en forma de dos victorias consecutivas le permitiría lograr la remontada. La única opción pasaba porque Nepomniachtchi entrara en un agujero negro ajedrecístico, como alguna vez le ha ocurrido. Y eso, con Carlsen al otro lado de la mesa en plan supernova ajedrecística, estuvo a punto de ocurrir. En la tercera, el ruso, que con su imaginativo y táctico estilo no sabe jugar a tablas, se enzarzó en un duelo de alto voltaje en la defensa siciliana. En este cara y cruz, primero Nepomniachtchi dispuso de una clara opción de tablas en el movimiento 31, luego Carlsen dispuso de gran ventaja, para a continuación desperdiciarla y recuperarla en los mutuos apuros de tiempo.
Finalmente, en la jugada 55 el campeón del mundo logró igualar 1,5-1,5 la manga. En la cuarta, con las piezas negras, y con la obligatoriedad de ganar, el noruego escogió un interesante esquema de la defensa siciliana no muy del gusto Nepomniachtchi. Este, podía haberse defendido sin, en apariencia, mayores problemas durante muchos movimientos antes de alcanzar el reparto del punto. Pero su carácter no es el de Caruana o Giri, y prefirió jugar de manera activa sin importarle quedar inferior. El número uno del mundo sabe explotar muy bien estas posiciones y logró el anhelado triunfo que le garantizaba las dos partidas relámpago de desempate (5+3).