Lejos quedan los tiempos en los que los estudiantes, en el instituto, tomaban apuntes y aprendían solo lo que estaba en los libros.
Desde hace casi una década, internet y la posibilidad de compartir conocimiento con la otra punta del mundo ha revolucionado la forma que tienen para aprender y las redes se han convertido en un estímulo para ellos, su ambición y sus conocimientos.
Las nuevas generaciones, acostumbradas a la inmediatez y a ser emisores a través de canales que dominan, saben, mejor que nunca, que el ingenio y el conocimiento pueden ayudarlos a desarrollar su pasión y su vocación emprendedora.