Alyosha Barreiro se define como un explorador sonoro, que exalta la identidad de México a través de un viaje musical alucinante
, donde se entrelazan, inspirado en instrumentos prehispánicos, la tecnología y la cultura ancestral.
Productor y compositor, Barreiro ha desarrollado un estilo propio, único e innovador siempre identificado con mis raíces
para conjurar, como chamán, un ritual mágico que puede envolver los sentidos de multitudes hasta llegar a las fibras emocionales de públicos en sesiones de inmersión sensorial o clases magistrales, pero su proyecto Prehispánica Electrónica se ha posicionado, de manera exitosa, en diversos foros.
Esta fusión me permite llevar a la audiencia por caminos de euforia; a veces, a otras vertientes más contemplativas e introspectivas. Lo cierto es que estas sonoridades ofrecen matices de un futuro, una realidad y una contemporaneidad; a la par de que brindan una vibración y visiones de un México místico, milenario y mágico
, sostuvo Barreiro.
El viaje que propone busca abrir los sentidos mediante la música, misma que reconecta con el núcleo sagrado que tenemos los mexicanos y, desde ahí, nos vamos curando
.
En más de 26 años de trayectoria, el artista siempre ha buscado reinventarse. Sus inicios fueron con la percusión hasta llegar a la música electrónica, pero ha puesto énfasis, desde hace una década, en rescatar y reinterpretar sonoridades milenarias. Uso esos sonidos a mi favor, que resuenan hacia el interior, porque en realidad me he dedicado a hacer música que, de alguna forma, ayude a las personas
, afirma.
Sobre la virtud de la música para sanar mente y cuerpo, admitió que es tema profundo, pues “si piensas que todo está hecho de vibraciones –como los planetas, la luz, los colores, nuestro cuerpo y la energía–, el ser humano se ha desintonizado y la música que es usada como medio de entretenimiento, puede lograr un reacomodo interno, lo cual busco con mis creaciones”.
Actualmente, agregó, hay mucho dolor, sufrimiento, angustia, tensión y debemos indagar en cómo podemos resonar desde esas emociones
.
Barreiro tampoco deja de crear en época de pandemia. “Siempre estoy metido en infinidad de proyectos, ya sean documentales, producciones discográficas y la composición; con ésta he hecho sesiones rituales sonoras que forman parte de las sesiones que imparte la compañía Sensorama.
Otra iniciativa en la cual ha intervenido es Efecto mariposa: meditación en movimiento, sobre la cual dijo: en el mayor confinamiento que la humanidad ha vivido abrimos las alas y bailamos para unirnos y curarnos
.
Ahora, Barreiro está concentrado en su trabajo con virtuosos guitarristas que tocan heavy metal a niveles brutales. Si realmente tienes la mente donde debe estar, que es abrirte a la música, se hallan experiencias
impactantes y novedosas, como otras emprendidas en el mundo del jazz o en Bauhaus hasta llegar a Etnofest, o un concierto de Bienestar como Save the Children.
Ayer estrenó Ecstatic Dance en la plataforma Zoom, donde la invitación a los internautas fue a bailar, meditar, escuchar y conectarse. “Es un lugar para probar nuevas exploraciones, ubicarse en el centro, establecer una intención y avanzar con la melodía de los sonidos y ritmos evocadores; nos juntamos para celebrar y liberarnos. Fueron invitados músicos y diyéis de todo el mundo a compartir su energía y música con sus sets”.
A lo largo de su trayectoria, Alyosha Barreiro ha sido comisionado para hacer música en importantes eventos y se ha presentado en el festival Vive Latino, en el Zócalo capitalino, en el Auditorio Nacional, en Cumbre Tajín, en el estadio Olímpico de Ciudad Universitaria y el Espacio Escultórico, así como en diversos estados del interior y países de Latinoamérica y Europa.