Vestido de negro y con cubrebocas, un bailarín salta y hace piruetas en la desierta Plaza de los Héroes del centro de Budapest al ritmo de una melodía que refleja la estructura molecular del coronavirus.
Para conmemorar el Día Mundial de la Danza, Zsolt Vencel Kovacs interpretó parte de la composición creada este mes por científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT, por sus siglas en inglés). Para mí, esta música trae melancolía, su monotonía me aporta tensión, y a medida que la música avanza se vuelve más rítmica y agresiva y al final se calma. Me inspira
, expresó el bailarín de 21 años.
El equipo del MIT usó una computadora para transformar un modelo de estructura del SARS-CoV-2 –el virus que causa el Covid-19– en melodías entrelazadas, asignando una nota diferente a cada uno de los aminoácidos de la proteína.
Kovacs, bailarín de la Ópera y el Ballet Nacional de Lituania, regresó a su casa cuando las fronteras europeas cerraron, tomando el último vuelo a Budapest para los ciudadanos húngaros. Ahora ensaya en su casa y trabaja en una panadería, con la esperanza de regresar a Lituania cuando cedan las restricciones.
Mientras, desafía a otros coreógrafos a realizar su propia interpretación de la melodía Covid
en otros lugares famosos, mostrando su belleza a futuros visitantes. El propósito es volver populares las plazas y sitios que se vaciaron por el coronavirus. En este momento, incluso las estatuas se sienten solas
, lamentó. Así, cuando termine esta epidemia, estas plazas podrán volver a llenarse de gente
, agregó.