Beyoncé y Taylor Swift hacen historia en los Grammy de la pandemia.

La autora de ‘Black Parade’ se convierte en la artista femenina con más gramófonos, 28, y Swift gana por tercera vez en su carrera en la categoría de mejor álbum. Fue una ceremonia dominada por las mujeres

La 63ª edición de los Premios Grammy logró ser una gala histórica tras un año sin conciertos masivos por el coronavirus. Sobre todo para las mujeres. Beyoncé rompió el récord como la artista femenina con más gramófonos el domingo en el Convention Center de Los Ángeles. Lo logró con el galardón a la mejor interpretación de rhythm and blues por Black Parade, la canción que lanzó el 19 de junio (día que el movimiento Black Lives Matter ha elegido para conmemorar la emancipación de los negros esclavizados), mientras las protestas contra el racismo se recrudecían en Estados Unidos.

Con ese premio, el cuarto de la noche para la diva, superó los 27 de la cantante de bluegrass Alison Krauss y alcanzó 28. A nivel global, solo supera a Beyoncé el director de orquesta húngaro Georg Solti, con 31. La artista se queda en segundo puesto, empatada con Quincy Jones.

Taylor Swift ganó en la categoría de álbum del año con Folklore, elaborado íntegramente durante la pandemia. Se convirtió así en la primera mujer cantante y compositora en alzarse tres veces con este premio, tras Fearless en 2010 y 1989 en 2016. Con esta hazaña, la artista de 31 años empató con Frank Sinatra, Stevie Wonder y Paul Simon como los únicos con tres Grammys en esa categoría. Y Billie Eilish, de 19 años, alzó incrédula el galardón a la grabación del año, por segundo año consecutivo, por su tema Everything I Wanted. “Esto es muy embarazoso para mí”, dijo la cantante sobre el escenario y aseguró que el premio, el más importante de la noche, debía ser para la rapera tejana Megan Thee Stallion, por su éxito Savage.