El Día Internacional del Orgullo LGBT es un día que se celebra cada 28 de junio en conmemoración de los disturbios de Stonewall de 1969.
El Día Internacional del Orgullo LGBT es una cadena de actos públicos festivos que la comunidad LGBTTIQ+ (personas lesbianas, gays, bisexuales, transgénero, transexuales, no binarias, intersexuales, queers) de todo el mundo celebra cada año para promover y a la vez exigir tolerancia y respeto igualitario de sus derechos.
Origen: Disturbios de Stonewall
Las revuelta de Stonewall se trató de una serie de manifestaciones espontáneas y violentas sucedidas el 28 de junio de 1969 en reacción a una brutal redada policial realizada en el pub “Stonewall Inn”, en el barrio neoyorquino de Greenwich Village. La clientela del pub, conformada por personas pertenecientes a la comunidad LGBT, opuso una fuerte resistencia durante tres días de disturbios.
Al final, la policía se dio por vencida y dejó de perseguir a estas personas de Nueva York. Este suceso es reconocido como el detonador del movimiento moderno pro derechos LGBTTIQ+ en Estados Unidos y en todo el mundo.
Desde entonces, cada año el movimiento se manifiesta de forma pacífica y festiva en este día, celebrando la igualdad y la diversidad de la sociedad actual, sin olvidar la exigencia de igualdad de derechos jurídicos, sanitarios y contra la discriminación, entre otros.
Criminalización de la comunidad
Aún son muchos los países que criminalizan las relaciones consensuadas del mismo sexo: según datos ofrecidos por la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Transexuales y Personas Intersex (LGBTI), los castigos van desde latigazos en Irán, prisión en Argelia y cadena perpetua en Bangladesh, hasta la pena capital en Mauritania, Arabia Saudita, Sudán y Yemen.
En la otra cara de la moneda, en la actualidad, las leyes que penalizan las prácticas homosexuales han
sido superadas en muchos países del mundo, y se reivindican la legalización del matrimonio homosexual, el establecimiento de familias homoparentales, el respeto a la identidad sexual de las personas transexuales y sus derechos al cambio legal de sexo y de nombre, entre otros. Todo ello, en un marco jurídico que ampara los derechos de la población LGBTTIQ+ a nivel local, nacional e internacional.
La diversidad en el constructo social
La diversidad reconoce todas las posibilidades que tienen las personas de asumir, expresar y
vivir la sexualidad, así como de asumir expresiones, preferencias u orientaciones, identidades sexuales
y de género, distintas en cada cultura y persona. Es el reconocimiento de que todos los cuerpos, todas
las sensaciones y todos los deseos tienen derecho a existir y manifestarse sin más límites que el respeto
a los derechos de las otras personas.