Además de los sonidos, las imágenes y la forma de hablar de una persona son herramientas comunicativas muy eficaces que provocan este efecto.
¿Qué es el efecto McGurk?
El efecto McGurk se define como un fenómeno perceptivo que marca una clara relación entre lo que se escucha y lo que se ve. Esto indica que nuestros sentidos no están aislados unos de otros, sino que están relacionados e interactúan entre sí. Se trata de una transversalidad entre los sentidos de un cerebro multisensorial que procesa el audio y la imagen de forma simultánea.
Por ejemplo, ¿alguna vez habéis hablado con alguien en un entorno ruidoso y miráis a la boca para intentar percibir lo que dice? Pues esto es lo que ocurre con el efecto McGurk. Miramos a los labios de una persona cuando habla, pero lo que escuchamos no coincide con lo que está diciendo.
¿Por qué se produce?
se produce porque el oído no percibe una señal auditiva clara y entendible, por eso se apoya en la articulación visual de los labios para interpretar lo que se quiere decir. En resumen, el efecto McGurk es una ilusión o percepción de un sonido, que lleva a que cada persona pueda interpretar una palabra diferente. Además de con los labios, también se puede producir el efecto McGurk con palabras escritas.
¿Bicicleta o Alquiler?
Antes de ver en el siguiente vídeo, piensa en la palabra “bicicleta” o “alquiler”. Cada vez que lo pongan, escucharán una u otra palabra, solamente cambiando el pensamiento:
Michael Beauchamp, profesor en el Departamento de Neurociencia del Baylor College of Medicine, explica el efecto McGurk en un estudio: si visualmente vemos unos labios pronunciar la sílaba ‘ga’ y, simultáneamente escuchamos el sonido ‘ba’, nuestro cerebro ‘oirá’ el ‘da’. Es decir, lo que ven los ojos puede cambiar lo que percibe el oído.