En el mundo del diseño gráfico, los logotipos son el corazón de la identidad visual de una marca. Para que un logo mantenga su fuerza, calidad y versatilidad en cualquier medio, la vectorización se ha convertido en una herramienta clave.
Un logo vectorizado es aquel que está creado con gráficos basados en vectores, es decir, en líneas y puntos matemáticamente definidos, en lugar de píxeles. Esto ofrece ventajas significativas frente a los formatos de mapa de bits como JPG o PNG.

Ventajas de la vectorización en logos
Escalabilidad ilimitada
Un logo vectorizado puede ampliarse al tamaño de una tarjeta de presentación o a la gigantografía de un anuncio sin perder nitidez ni deformarse.

Edición sencilla
Al estar formado por nodos y trazos, es más fácil modificar colores, formas o detalles sin afectar la calidad.
Compatibilidad con distintos formatos
Los vectores se adaptan a múltiples usos: impresión, bordado, serigrafía, grabado láser, o medios digitales.

Archivos más ligeros
En comparación con imágenes de alta resolución, los archivos vectoriales suelen ocupar menos espacio, lo que facilita su almacenamiento y envío.
Aplicaciones prácticas
Las marcas utilizan la vectorización no solo en la creación de sus logotipos, sino también en la elaboración de manuales de identidad, campañas publicitarias, material promocional y hasta en la adaptación de diseños para productos físicos.
La vectorización es más que un recurso técnico: es la garantía de que un logotipo mantenga su esencia en cualquier soporte. Gracias a ella, las marcas pueden proyectar una identidad sólida, profesional y coherente en todos los contextos donde se presente.


