El efecto del ruido sobre las personas y los lugares de trabajo son muy complejos, para disminuir el ruido, prevenir problemas de salud y mejorar el rendimiento de los empleados debemos de insonorizar.
Los sonidos se pueden clasificar en dos tipos:
Ruidos del exterior: son aquellos que provienen de las sirenas, coches, camiones y vehículos en general, trafico, obras, etc…
Estos son más fuertes cuando las oficinas o locales no cuentan con aire acondicionado y tienen que tener las ventanas abiertas.
Ruidos del interior: aquellos que son ocasionador por las teclas de los ordenadores, maquinarias, zapatos, movimientos de sillas o mobiliarios, entre otros.
Para combatir el efecto del ruido, se ha implementado la insonorización, la cual ayuda a mejorar el trabajo y las condiciones de aislamiento acústico.
Está comprobado que la exposición a sonidos continuos influyen en las labores de los empleados que serán menos eficientes (durante ocho horas diarias y 40 horas semanales) pueden sufrir diferentes problemas de salud, como:
- Pérdida de audición por ruidos constantes.
- Problemas en mujeres embarazadas, tanto en el feto, en el cansancio y aumento de la presión arterial.
- Pérdida auditiva, considerada como una enfermedad común entre los empleados industriales.
- Problemas de estrés.
Fuente: Aistec