Los murales en México surgieron poco tiempo después de la Revolución Mexicana de la mano de Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros y José Clemente Orozco quienes plasmaron sus ideales en obras a gran escala en México y más allá de sus fronteras…
De esa época ha quedado un gran legado pictórico que actualmente otros creativos han retomado para retratar la cara del México moderno. Nos dimos a la tarea de enlistar los murales entre antiguos y actuales que por su belleza e impacto social debes conocer.
Epopeya del pueblo mexicano de Diego Rivera en Palacio Nacional Ciudad de México
Una de las obras más grandes de Diego Rivera. Este mural fue pintado de 1929 a 1935 y cuenta con una superficie total de 276 metros cuadrados, se ubica en los muros que rodean las escaleras centrales de Palacio Nacional.
Se divide en tres secciones; el plano de la derecha representa la época prehispánica, el plano central se representa el periodo de la conquista española y finalmente el plano de la izquierda representa la formulación de los ideales marxistas a comienzos del siglo XX.
Representación histórica de la cultura de Juan O’Gorman en Biblioteca Central de la UNAM, Ciudad de México
El mural que adorna la fachada de la Biblioteca Central de la UNAM es creación del mexicano Juan O’Gorman y mide 4,000 metros cuadrados. O’Gorman utilizó la técnica de mosaico para narrar la historia de México al estilo de los códices prehispánicos.
Hombre en llamas de José Clemente Orozco en Hospicio Cabañas, Guadalajara
El Hopicio Cabañas es hogar de diversos murales del legendario José Clemente Orozco pero probablemente el más famoso sea Hombre en llamas. Esta obra es la pieza clave del conjunto muralístico, la crítica popular afirma que las cuatro caras que lo rodean equivalen a los cuatro elementos de la naturaleza.