Salir: Cuando intentamos salir de esa zona, comenzamos a sentir miedo por la incertidumbre de no saber qué nos espera. Somos humanos y es normal que temamos a lo que no conocemos. Sin embargo, debemos ir en búsqueda de las oportunidades.
¿Qué es la zona de confort?
Llamamos zona de confort a esa forma de vida en la que nos encontramos cómodos, felices o no, pero seguros y tranquilos.
El ser humano tiene la tendencia a sentirse cómodo cuando todo su entorno está controlado, es decir, puede prever qué va a ocurrir en cada momento. Por contra, le genera nerviosismo y ansiedad cualquier cambio que introduzca incertidumbre en su día a día. Por lo tanto, decimos que estamos en nuestra zona de confort cuando tenemos la sensación de mantener el control de todo lo que ocurre en nuestras vidas y pasamos a tener un estado mental que voluntariamente evita cualquier cambio que pueda producir sensación de incertidumbre, y por lo tanto provocar nerviosismo, miedo o ansiedad.
¿Por qué deberías salir de tu zona de confort?
- Salir de tu zona de confort te ayudará a conocerte mejor. Exponerte a situaciones que no controlas hace que mejore el concepto que tienes de ti mismo, que te conozcas mejor.
- Te harás mucho más valiente. Verás que el miedo no te conduce a nada. Puede que la incertidumbre, el no saber qué va a pasar te paralice pero tranquilo, es algo pasajero.
- Tendrás una visión más amplia de tu entorno. Serás un maestro de la creatividad porque volverás a mirar el mundo con los ojos del que está aprendiendo, del que se adapta al entorno.
- Cada día será nuevo y diferente. Emprender algo por ti mismo, algo que es tuyo y que te apasiona hará que comiences cada día con una energía renovada.
- Serás mucho más feliz. Simplemente por el hecho de ser el dueño de tu vida, de hacer lo que te gusta o conseguir los objetivos que te has propuesto.
- Conocerás a gente nueva y esto te enriquecerá personalmente. Porque a veces también ponemos nuestra vida social en piloto automático y esto conlleva que, bien por comodidad o bien por miedo, se nos hace un mundo el conocer gente nueva y seguimos nuestra existencia rodeado de las mismas personas año tras año.
- Adquirirás nuevos conocimientos. Al salir de tu zona de confort y enfrentarte cara a cara a la realidad que te rodea te darás cuenta de que necesariamente tienes que aumentar tu formación y conocimientos.
- Aprenderás a crecerte ante las adversidades. El mundo no es de color de rosa para nadie, ni siquiera para los valientes. Puede que tropieces por el camino, que te caigas o que fracases. Nunca, nunca lo como algo negativo.
¿Cómo salir de la zona de confort?
Reconoce tus límites: Estamos cómodos en nuestra zona de confort porque nos hemos adaptado de tal forma que nuestros límites no se ven tocados. Pero cuando inicies el escape de tu zona de confort comenzarán a revelarse todas tus barreras internas o externas. Lo primero que debes hacer es reconocerlas, darles su importancia y pensar en cómo vencerlas. Acepta que no eres tan perfecto como quisieras, pero reconoce que puedes llegar a donde desees.
Buscar compañía: Salir de nuestra zona de confort por cuenta propia puede ser complicado, pero si hay alguien que comparta ese interés todo puede fluir más fácilmente. Puede tratarse de un amigo que busque lo mismo o un terapeuta que te dé su punto de vista y te ayude a identificar los cambios que requieres.
Aprende a aceptar: En nuestra zona de confort nos acostumbramos a que las cosas sean de una determinada forma. Cuando decidimos salir nos encontraremos con aspectos que no podemos manejar o controlar. En este caso, es importante que aprendamos a aceptar las situaciones que se nos presentan. Si quieres hacer nuevos amigos, debes aceptar sus características, particularidades y diferencias.
Imagina lo que quieres y trabaja en ello: Cada pequeña acción que llevas a cabo te ayudará a ampliar tu perspectiva. Si tu zona de confort implica ser antisocial y quieres salir de ahí, una pequeña conversación con alguien distinto cada día puede hacer la diferencia. No seas tan exigente, un “buenos días” al vecino hoy y una sonrisa amistosa al taxista mañana pueden cambiarlo todo.
Salir de tu zona de confort te ayudará a tener una vida más rica en emociones, conocimiento y perspectivas. También podrás crecer y evolucionar a una mejor versión de ti mismo. Llegarás a ser mejor persona, ganarás en confianza y conocerás a muchas personas interesantes. ¿No crees que es momento de arriesgarse?