Realizar un seguimiento de obra controlado y además detectar errores en tiempo real, mientras estamos construyendo la obra, para muchos era una utopía y más si estamos hablando de proyectos con dimensiones importantes. Una locura para todo arquitecto y aparejador… Pues la solución se llama el Robot Doxel, y arroja unos resultados más que satisfactorios desde la perspectiva técnica.
Doxel es una nueva empresa que salió de la clandestinidad esta semana con una ronda de financiación de 4,5 millones de dólares. Su negocio, proporcionar una construcción más barata, y su secreto es combinar cantidades masivas de datos con técnicas de inteligencia artificial.
El robot escanea las obra en 3D que se está construyen de forma autónoma todos los días, así monitorea como progresan las cosas, rastreando lo que se instala y verificando si es correcto en el momento adecuado y en el lugar preciso.
Una vez que se cierra la obra por la tarde – noche, el pequeño robot de forma autónoma rastrea y escanea metódicamente todos los trabajos y avances realizados por el día (Puede escanear unos 30.000 metros cuadrados en el transcurso de una semana).
Allí, la inteligencia artificial se pone a trabajar marcando cualquier elemento que no sea correcta y que se desvíe de los planos de obra y el proyecto para que al día siguiente, podamos verificarlos de forma fácil.
Aunque es posible que estemos obsesionados con los robots, se trata en realidad de interpretar los datos que recopilan, y los robots son simplemente la forma más eficiente y rentable de hacerlo.