Brainstorming también conocido como lluvia o tormenta de ideas, es una técnica de creatividad, que fue descrita por el publicista Osborn.
Desde entonces se ha aplicado a múltiples ámbitos de la educación y se considera una técnica generadora de ideas de gran utilidad y eficacia, en la resolución de conflictos y concretamente en el proceso de la educación.
“El Brainstorming en la educación”
En el ámbito de la mediación y educación, la técnica del brainstorming consiste en facilitar un espacio creativo en una o varias sesiones del proceso.
Para que las partes puedan aportar de manera simultánea y durante un tiempo determinado el mayor número posible de ideas sobre la resolución de uno o varios asuntos que se hayan planteado.
“Las reglas del Brainstorming”
Esta herramienta tiene unas reglas claras, que en el proceso de mediación podemos resumir en:
- Pensar libremente: Es recomendable que aporten muchas ideas en esta sesión, cuantas más ideas aporten, más probabilidades de encontrar una solución.
- Las ideas no se juzgan: Es importante que en este momento no se juzguen las aportaciones que se van haciendo.
- No crítica: Durante el proceso no es el momento para la crítica, ni pueden hacerse comentarios negativo.
- Desarrollar ideas: Se aplica el efecto multiplicador así las partes pueden construir nuevas ideas sobre las ya formuladas.
- No es momento para alcanzar acuerdos: En la sesión de brainstorming no se acuerda ninguna propuesta ni se van a tomar decisiones.
- Confidencialidad: La sesión de brainstorming está presidida por el principio de confidencialidad.
Fuente: LEGALTODAY