Desahogarse: No podemos negarlo, a veces evitamos el desahogo emocional. Es más fácil callarse y volver el rostro. O sencillamente, intentar pasar página aferrándonos con fuerza a la cotidianidad para intentar olvidar. Para intentar no pensar.
Pero las emociones no se disuelven sin más como el humo escapando por una ventana abierta. Las emociones se acumulan y nos hieren en silencio. Se convierten en espectros internos capaces de dañar nuestro cuerpo y nuestra mente, espectros sin forma definidos a través de nuestras experiencias, nuestros fracasos, desilusiones o pérdidas.
Reconocerlas y hacerles frente es un modo de adecuado de asumir nuestra propia realidad interior para cuidar de nuestra salud emocional, imprescindible sin duda para nuestro equilibrio e integridad personal.
¿Qué es el desahogo emocional?
El desahogo emocional es un alivio de las emociones y sentimientos que nos afligen, implica dejar salir las emociones que nos están dañando, dejar de acumularlas y expresarlas. Desde esta perspectiva, el desahogo emocional es positivo ya que nos permite liberarnos de un peso.
No obstante, el problema es que cuando esas emociones han estado reprimidas durante tanto tiempo, muchas veces no hayamos la mejor manera de expresarlas y terminan convirtiéndose en un aluvión emocional, una manifestación violenta de lo que sentimos.
¿Por qué es importante desahogarse?
El mayor beneficio de exteriorizar los sentimientos será el alivio emocional que el implicado sentirá. El ser capaz de dar este paso (que puede parecer muy sencillo, pero en realidad puede ser muy difícil para la mayoría).
Ayudará a que las emociones que generen malestar, incertidumbre o intranquilidad salgan de su vida. A menudo las personas luchan por aguantar y callar sus disgustos, tristezas y angustias, ya que no quieren dejar ver ante los demás su lado más sensible.
Es necesario dejar de lado estas inseguridades como son la pena, los prejuicios o pensar en el qué dirán. Ya que es esto, los hace esclavos de sus emociones y pensamientos negativos. Al callar o negar este tipo de emociones, lo único que va a provocar es que en determinados momentos estalles y tengas un comportamiento hostil y agresivo con los demás.
¿Qué sucede cuando no nos desahogamos?
Cuando una persona no es capaz de expresar lo que siente, sus emociones se acumulan y los hieren en silencio. Estos sentimientos no dichos, se convierten en una carga interna, la cual tiende a afectar el cuerpo y la mente.
El reprimir estas emociones intensas puede originar daño tanto psicológico como físico, debido a que la persona no solo se sentirá angustiada. Sino también es más susceptible a manifestar dolores físicos gracias a las cargas emocionales.
La mayoría de las veces se suele ocultar aquello que se está sintiendo, con el fin de no preocupar a los demás. O simplemente evitar hablar sobre lo que pasa. Es muy común que las personas prefieran decir que están bien para evitar hablar de sus malestares. Sin darse cuenta de que esto les trae más problemas. Pues el negar sus intranquilidades o angustias hacen que deban fingir un estado de ánimo que no sienten.
Consejos para desahogarte
Ser consiente de las emociones: Es muy común que las emociones se puedan camuflar entre ellas mismas. Que alguien pueda pensar que está sintiendo tristeza o angustia cuando en realidad tienes indignación e ira.
Es necesario, que a medida que se vaya teniendo el sentimiento ir profundizando en este. Con el fin de llegar al foco de las propias emociones y poder identificarlas con mayor claridad, para así darles un mejor manejo.
Expresar las emociones: Las emociones pueden canalizarse de muchos modos. Las formas más comunes pueden ser llorando, haciendo ejercicio, dando un paseo o buscando un instante de soledad. Un momento donde se pueda estar a solas con sí mismo, para reorganizar los pensamientos. Darse cuenta de lo que se está sintiendo y pensar de qué forma positiva pueda aliviar esta carga emocional.
Otra forma de expresar los sentimientos es recibiendo ayuda por parte de un tercero. A la hora de buscar desahogarse emocionalmente es bueno recurrir al apoyo personal (ya sea en un familiar o un amigo) o al apoyo por parte de un profesional en salud mental. Es importante buscar personas que te van a escuchar y a comprender.
Ampliar la red de apoyo: No siempre se considera la ayuda de un profesional y en la mayoría de ocasiones, el recurrir a este es un paso muy difícil. Es por ello que prefieren buscar la ayuda o apoyo de algún familiar o amigo cercano. Es importante que antes de hablar de tus sentimientos con alguien. Pongas en consideración, con quien de tu círculo más cercano tienes más confianza para hablar de la situación.
Así mismo tener en cuenta quien te podría ayudar mejor, quien puede comprender mejor tu situación y te dará un punto de vista objetivo.
Ejercicio de vaciar la mente: La tensión emocional suele ir acompañada de pensamientos negativos tales como, juicios, quejas, victimización y exigencias. Estos pensamientos recurrentes son los que alimentan al estado de ánimo negativo. En ocasiones lo que se necesita es desconectar la mente para poder liberarse de estos pensamientos negativos. Esos que generan malestar y es allí donde se presenta la necesidad de desahogarse.
Para realizar este ejercicio es necesario estar en un sitio tranquilo donde te puedas relajar. Puedes utilizar técnicas de respiración para ir encontrando la tranquilidad que requieres.
Realizar un diario emocional: Desde el momento en el que te enfocas a plasmar lo que estás sintiendo y expresas las emociones a través de palabras en un papel, tienes más tiempo para reflexionar. Por lo que llevar un diario te será algo muy liberador.
La clave de esto consiste en tener un cuaderno donde puedas centrarte en las emociones que experimentas en situaciones específicas. Esto con el fin de hacer consciente lo que estás sintiendo y así mismo, aprender a tomar perspectiva de lo que ha ocurrido.
Este ejercicio puede ser de gran ayuda, no solo para expresar lo que sientes, sino también para encontrar soluciones o estrategias para enfrentar dichas situaciones. Tener un diario y leerlo de vez en cuando también te ayudará a empoderarte. Mirar atrás y confirmar las etapas difíciles que has superado, permitirá confiar más en tus capacidades y resiliencia.
Acude a un profesional en salud mental: Un profesional en salud mental es una persona que puede comprender tu situación y te ayudará a desahogarte sobre los problemas que estás experimentando. Además, te brindara herramientas y habilidades para enfrentar estos y así encontrar la solución adecuada a cada conflicto.
En terapia psicológica te podrás sentir comprendido y escuchado, de manera especial y respetuosa, además recibas orientación y acompañamiento. Hablar y escucharse es parte del proceso para sanar y sentir alivio, para ordenar ideas y ver con mayor claridad lo que está sucediendo.
Fuente: Hakuna Matata
Victoria Cardona