El plano que te ayudará a tu hijo a prosperar.
Los niños podrían enfrentar dificultades, pero eso no les previene de florecer o de retroceder.
Los factores ambientales pueden ayudar a promover la resiliencia.
La resiliencia es importante para reducir las dificultades de salud mental.
La investigación sugiere que el estrés y las experiencias de adversidad durante la infancia puede causar cambios en el cerebro que incrementan los riegos en los niños de retrasos en el desarrollo, problemas de salud y problemas de salud mental (Weir, 2017). Mientras que muchos niños pueden experimentar dificultades, eso no les previene de florecer o de retroceder.
De acuerdo a la ciencia de la psicología, tanto factores internos como externos pueden contribuir a la resiliencia de los hijos. Por ejemplo, los factores internos como el autocontrol, la regulación emocional, y la idea de que uno puede lograr una meta, puede ayudarles a recuperarse de la adversidad (Weir, 2017).
Adicionalmente, los padres tienen un papel especial en cómo los factores externos de los ambientes de los hijos promueven la resiliencia, tal como contar con cuidadores que apoyan. En mi papel como psicólogo, estos son las llaves de la resiliencia que suelo compartir con mis clientes y sus familias. El ser capaz de descubrir estas fortalezas en tu hijo no solo le ayudará en ajustarse en situaciones difíciles, sino que también le ayudará en la fundación del manejo de su vida adulta.

¿Qué es la resiliencia?
La resiliencia ha sido definida como la capacidad para adaptarse a la adversidad, trauma, tragedia, amenazas o fuentes de estrés. (American Psychological Association, 2012). Contrario a lo que los padres pueden creer -que los niños son naturalmente resilientes- la resiliencia requiere acción. Para los hijos pequeños que no cuentan aún con lenguaje para comunicar sus grandes sentimientos y emociones, que podría ser difícil reconocer cuando estén en aprietos. Esto puede llevar a asumir que ellos la están pasando bien, cuando en realidad están teniendo dificultades con lidiar con situaciones difíciles.
Para fomentar la resiliencia, primero debes de tener consciencia de que tu hijo pequeño está en aprietos. Una vez que puedes identificar eso, pueden guiarlos hacia la construcción de resiliencia. De acuerdo con la American Psychological Association, la resiliencia puede incluir:

– Ayudar a tu hijo a hacer conexiones y desarrollar un sistema de apoyo.
– Creando una rutina o estructura para normalizar la vida.
– Vincularse con actividades de auto-cuidado para balancear los eventos estresantes.
– Educando en un punto de vista positivo y ayudar a tus hijos a aprender a sobrellevar adversidades.
El plan para cultivar resiliencia en tu hijo
En los últimos años, los datos señalan un declive en la salud mental y bienestar entre los jóvenes de Estados Unidos (Hinojosa&Hinojosa, 2024). En algunas comunidades, los niños suelen enfrentarse a experiencias adversas en su infancia. Hinojosa e Hinojosa (2024) reportaron también que existe un enlace entre las experiencias infantiles adversas y la discapacidad en el desarrollo de un niño, incluyendo esto al desarrollo del cerebro, la salud física, el desarrollo social y el aprendizaje y los resultados escolares.
Adicionalmente, la investigación señala que los niños afroamericanos suelen experimentar más racismo y discriminación, lo cual puede tener un impacto negativo en su salud mental, autoestima y bienestar (Turner, 2024). Dado lo que sabemos por la ciencia psicológica, es necesario que equipemos a nuestros hijos con herramientas para que sean resilientes.
Para cultivar la resiliencia en los hijos, es importante crear un ambiente positivo y darles habilidades para superar los eventos negativos estresantes de la vida. Las experiencias positivas en la niñez sería una forma de brindar apoyo a tu hijo. Estas experiencias son descritas como encuentros que crían, apoyan y engranan a los hijos a relaciones estables y seguras (Hinojosa & Hinojosa, 2024).

También incluyen estilos de comunicación abierta familiar, tener la habilidad de vivir y jugar en un lugar seguro, ambientes estables y protectores, oportunidades constructivas para involucramiento social y recibir mentoría de los adultos. Estas experiencias ayudar a promover la resiliencia y reducir el riesgo de dificultades en la salud mental después de vivir estrés o un trauma.
Turner (2024) describe el método HEAL -sanar emociones y ansiedad a través de la liberación- como un acercamiento para construir resiliencia en niños afroamericanos. El método HEAL usa evidencia científica de la terapia cognitivo conductual, socialización racial y liberación psicológica para identificar estrategias para padres que permitan promover la resiliencia y la superación de estrés racial y cultural. Aquí se comparten estrategias para cultivar resiliencia.
Comprende la salud mental de tu hijo:
Para apoyar a tu hijo, primero debes de reconocer cuando ellos están teniendo complicaciones. Monitorea y revisa con tu hijo para comprender mejor las situaciones o lugares que pudieran disparar estrés o emociones intensas. Pon atención a sus cambios de conducta, alimentación o sueño. Si notas alguno de estos cambios después de un evento estresante, puedes estar seguro que identificarás cómo apoyar a tu hijo.
Modela prácticas saludables para lidiar con situaciones:
Los niños suelen aprender a cómo lidiar con las situaciones estresantes a partir de la observación que tienen de sus padres. Mientras tú navegas por el estrés en tu vida, es importante emplear prácticas de enfrentamiento que puedan incluir: ejercicio, practicar ejercicios de respiración o conectar con amigos o familiares para tener apoyo.

Promueve el orgullo cultural y racial:
Las investigaciones muestran de forma consistente, que el tener una identidad racial positiva mejora la resiliencia ante el estrés racial y la discriminación. Para los niños afroamericanos, es importante que se promueva el orgullo racial a través de los libros, el conocimiento sobre su herencia cultural y afirmaciones positivas. Por ejemplo, usar frases como: “soy inteligente” o “ser de piel oscura es mi super poder” puede ayudar a prevenir prejuicios raciales negativos en nuestra sociedad.
Involúcrate con activismo y literatura racial:
Los estudiantes muestran que el activismo y el involucrarse en la concientización racial puede ayudar a promover la resiliencia y el bienestar. Para los niños, esto podría verse como ayudar a tu hijo a escribir una carta a un político local sobre un problema crítico en su comunidad o usar películas para resaltar cómo la gente se ha involucrado en los esfuerzos de justicia social para crear una sociedad más inclusiva. El activismo puede incluir incluso actividades como la donación para apoyar a grupos de derechos civiles, o atender a una marcha pacífica, o apoyar a algún boicot.
La clave para recordar de que no existe un solo camino para apoyar a tu hijo y construir resiliencia. Al construir resiliencia no existe un acercamiento ideal que sirve para todos. Tu presencia, consciencia e intencionalidad como padre, es lo que hace toda la diferencia. Pero entender que la salud mental de tu hijo, el modelar estrategias sanas de afrontamiento, promover el orgullo cultural y racial e involucrarte con literatura racial y activismo, están equipando a tu hijo con las herramientas que necesitan para prosperar. Mantente involucrado, mantente observador y recuerda que tu guía del día de hoy puede dar forma a más resiliencia y confianza para tu hijo el día de mañana.

American Psychological Association (2012). Resilience guide for parents and teachers Retrieved from https://www.apa.org/topics/resilience/guide-parents-teachers
Hinojosa, M. S., & Hinojosa, R. (2024). Positive and adverse childhood experiences and mental health outcomes of children. Child Abuse & Neglect, 149, 106603.
Turner, E.A. (2024). Raising resilient Black kids: A parent’s guide to helping children cope with racial stress, manage emotions, & thrive. New Harbinger Publications.