Muchos sobrevivientes luchan con la confianza y con cómo ponerles límites a las amistades.
El abuso infantil y el trauma familiar puede influenciar profundamente la forma en cómo construimos y mantenemos nuestras amistades como adultos.
Las dificultades con la confianza, regulación emocional y poner límites, son muy comunes.
Sonia creció en un hogar lleno de negligencia emocional y abuso verbal. Sus padres solían estar ausentes, tanto física como emocionalmente, dejándole a ella sola en la resolución de cómo lidiar con cosas que se le presentaban. Como resultado, Sonia desarrolló un profundo miedo de abandono y batalló con confiar en otros, siempre preparándose para el abandono.
En su vida adulta, estos miedos se filtraron a sus amistades. Cuando su mejor amiga, Emily, canceló los planes al último minuto Sonia asumió lo peor- ella había sido rechazada. Se sintió abandonada. Sonia se retiró emocionalmente evitando contacto con Emily por días, convencida de que su amistad había terminado.

Su respuesta confundió a Emily, quien había crecido con buenas demostraciones de afecto en casa. Incapaz de tramitar la ruptura, las chicas se separaron culpándose la una a la otra.
¿Te puedes identificar con Sonia? Yo sé que yo puedo. Mi historia de trauma indudablemente afectó mi habilidad para hacer y mantener amistades. Esto es especialmente verdad cuando era joven, antes de comenzar mi camino de la sanación. Ante la ligera sensación o percepción de abandono, se dispara mi ansiedad.
Creciendo en una familia no saludable puede influenciar en nuestra forma de construir amistades.
El abuso infantil nos quita experiencias saludables de amor, llevándonos a tener dificultades con las interacciones interpersonales. Cuando crecemos en un lugar donde la comunicación no es saludable o incluso atemorizante, nos influye profundamente en cómo formamos y mantenemos amistades de adultos. Estas son de las formas principales en cómo sucede esto:

Dificultades con la confianza.
La confianza es la piedra angular de cualquier relación sana, incluyendo la amistad. Como sea, para aquellos que crecieron en ambientes disfuncionales o de familias abusivas, desarrollar y mantener la confianza puede ser desafiante. Esto nos puede llevar a temer que otros nos abandonen o nos rechacen, incluso en las amistades cercanas. Esto miedo al abandono se puede manifestar de muchas formas en las amistades adultas. Algunos sobrevivientes pueden convertirse en muy dependientes de sus amigos, buscando su constante validación y aseguramiento, mientras que otros alejarán a las personas o evitarán desarrollar amistades para evitar ser lastimados.
Como Sonia, los sobrevivientes podrían tener dificultades para diferenciar conductas normales y señales de aviso de abandono. Sonia estaba en alerta ante el rechazo y actuaba de formar que, en momentos, la protegían de un dolor inminente. Como sea, mientras esta habilidad de duelo fue desarrollada para protegerla, terminó constándole la amistad ante su incapacidad para comunicar sus sentimientos.
Dificultad con la regulación emocional.
Aquellos que crecieron en ambientes caóticos o emocionalmente volátiles, podrían tener dificultades para regular sus emociones cuando se enfrentan a desacuerdos con amigos. Muchos sobrevivientes podrían reaccionar impulsivamente, exagerar en su respuesta, o cerrarse emocionalmente, sin realmente entender porqué están teniendo sentimientos tan intensos. Puedo ver atrás y ver muchas de mis amistades durante la adolescencia y colegio, y ver esos patrones en mí.
Trong estaba comiendo con sus amigos una tarde cuando se dio cuenta que se estaba involucrando en un argumento muy agitado con un amigo. Él había pensado que el amigo se estaba burlando de él y reaccionó desproporcionadamente a la situación. Después, él estaba muy apenado por su conducta, pero no fue capaz de reparar la amistad debido al miedo de comunicar sus sentimientos.

Retos para poner y mantener límites:
Cuando los niños no son enseñados que sus necesidades emocionales y físicas importan (o incluso que otras necesidades son importantes), ellos podrían internalizar la creencia de que poner límites es egoísta o peligroso. Como adultos, esto puede llevar a la dificultad de decir no, extralimitándonos para ganar aceptación o evitar el conflicto, o convertirnos en extremadamente cautelosos de los límites de otros por temor a hacerlos enojar o molestarlos.
Tim batalla en afirmarse a si mismo y a sus necesidades con sus amigos. En lugar de ello, él termina haciendo lo que otros quieren que él haga, incluso si él se siente incómodo, debido a que tiene temor de perder su amor y afecto si ellos deciden que no es “cool” o es “aburrido”.
Como Tim, muchos sobrevivientes se encuentran a si mismos diciendo “Sí” a cosas que no quieren hacer, siguiendo los planes de otros para evitar la confrontación o sacrificando sus propias necesidades para el bien y placer de otros.
¿Podemos cambiar los patrones?
En corto, sí. Especialmente con autoconsciencia y autocompasión.
¿Reconoces alguno de estos tratos en tus amistades? ¿Te es difícil crear amistades saludables, complaciendo los vínculos ante miedos de abandono o resultar lastimado? ¿O tienes dificultades con la confianza? Si es así, tómate un momento para reflexionar en cómo estas experiencias te han dado forma.

Recuerda darte a ti mismo gracias y entendimiento.
Estas conductas son mecanismos de protección en cierto punto. Agradece a esa parte de ti por hacer ese esfuerzo para mantenerte segura. Ahora, cálmate a ti mismo al desarrollar mejores habilidades de duelo y trabaja activamente hacia romper los viejos patrones para construir relaciones más fuertes y más auténticas.